Enfocar un objeto dentro de una escena significa que la cámara graba nítidamente ese punto donde hemos enfocado. Pero si observas la fotografía que has tomado con un poco de atención verás que hay una parte delante del objeto y otra posterior que también han salido enfocadas. A toda esta zona es lo que se denomina la profundidad de campo.
Pero como siempre ocurre para algunos parámetros, aquí también existen una serie de factores que influyen en la profundidad de campo. Veámoslo uno a uno:
1.- Depende de la apertura que utilices.
A mayor apertura mayor profundidad de campo. Fíjate como la zona sombreada se va ampliando conforme aumenta el número f
2.-La distancia al sujeto
Cuanto más alejado este el objeto más zona enfocada te saldrá próximo a ese objeto. Observa este gráfico .
3.- La focal del objetivo elegido
Cuando usas teleobjetivos obtendrás una profundidad de campo mucho más reducida que si usas un angular, debido a las características ópticas en que se basan.
A partir de aquí, ¿que necesitas saber a modo práctico?
En principio hay dos cosas importantes que se pueden deducir de estos gráficos.
1º) Si usas una abertura f cerrada, f11 por ejemplo en combinación con un angular, un 28mm por ejemplo, obtendremos una muy buena zona profundidad de campo. Por decirte que la mayor parte de tu fotografía saldrá con perfecto enfoque tanto los elementos próximos a ti como los más lejanos. Junto al Angulo de visión aquí tienes otro razón por la cual se usa el angular en la mayoría de situaciones en fotografía de paisaje.
2º) Utiliza la menor apertura que te permita tu objetivo en combinación con la máxima focal que tenga, es decir, si tienes un zoom las focales consideradas largas (teleobjetivo). Obtendrás una zona muy limitada que te saldrá enfocada, incluso si cierras el diafragma no conseguirás tanta profundidad de campo como cuando usas el angular. Aprovechando estas características podrás aislar tu motivo del resto de la escena para darle la importancia o realce que pretendes.